El síndrome de Helsinki: un síndrome muy real
En la película «La Jungla de Cristal» (Duro de Matar en latinoamérica, Die Hard en el original) hay un momento en el que sale una televisión debatiendo el asunto de los rehenes. En el plató sale un experto psicólogo que dice que si la situación se prolonga los rehenes empezarán a sufrir el «Síndrome de Helsinki«, a lo que el presentador hace un inciso, mira a cámara y dice, «Helsinki, Suecia»; y es rápidamente corregido por el psicólogo diciendo «Finlandia».
Cara de tonto del presentador y la escena se acaba.
Todos sabemos que el síndrome en el que los rehenes simpatizan con sus captores es el Síndrome de Estocolmo.
No estoy muy seguro por qué en «La Jungla de Cristal» decidieron cambiarlo (no creo que sea un error, sino más bien una broma). Pero como ese es el título que le dieron en la película, y aquí estamos para hablar de Finlandia, yo también usaré el mismo término.
El síndrome de Helsinki
Viviendo en el extranjero se debate sobre las cosas que pasan dentro del país en el que está.
Como siempre, hay cosas buenas que pasan en el país que nos hacen decir «pues esto en España es mucho peor» y la mayoría dará su aprobación.
Pero dices «esto en este país es terrible» o «en España esto es mucho mejor» , y ahí la cosa cambia en muchas ocasiones.
Un amigo que ha pasado muchos años viviendo fuera y que coincide conmigo les ha puesto su propio nombre: «Los Papistas«.
Le puso ese nombre por aquello de ser más papistas que el Papa, claro esta, y si no hubiera tenido ya en la cabeza a «La Jungla» y este post quizá lo hubiera llamado de la misma manera.
El vaticano: donde hay que ser más papista que el Papa. Fuente (CC: by)
El Síndrome de Helsinki se da, como digo arriba, hablando con otros españoles que viven en el extranjero y que defenderán el país en el que están y denostarán España por norma, sin enfocarse en el tema concreto.
En mi experiencia, y por la esencia del propio medio (no se conoce a la gente en persona, se está hablando desde en un ordenador) se da sobre todo cuando se es miembro de algún grupo de «Españoles en X» en Facebook.
Puede también darse en Twitter, foros, etc. He de reconocer, sin embargo, que cuando hablamos de cosas malas de Finlandia en este blog, hay más incredulidad que síndrome de Helsinki).
Un inciso
Yo soy miembro de dos de estos grupos. Es corriente que cuando se critica algún punto de la vida en el país o la ciudad de la que trata el grupo se forme un gran un hilo de respuestas orientadas a disculparlo, justificarlo o decir que España es peor por otras razones diferentes a las que se estaba hablando. El síndrome de Helsinki en estado puro.
Antes de seguir, un inciso aclaratorio: no es que «yo tengo razón en todo y siempre la tendré» en cualquier cosa de la que hable. Eso lo tengo más que asumido.
Facebook: lugar en el que veo de vez en cuando el síndrome de Helsinki. Fuente (CC: by)
Tampoco es que intente hacerle cambiar a la gente lo que piensa.
No tengo esa clase de tiempo para convencer a todo el mundo de que piense como yo, o haga lo que yo creo que la gente tiene que hacer. Prefiero que cada uno piense como quiera.
Pero creo que es una sana actitud el no estar subyugado a soportar cosas malas (o no tan buenas) del sitio en el que se está, y que ponerlo de manifiesto sea motivo de respuestas tipo «Aquí las cosas funcionan así. Si no te gusta no haber venido» o «Pues en España mucho peor porque tiene esta, esta, y estas cosas malas«, dos argumentos muy, muy flojos.
El primero no exento de servilismo y «papismo», y el segundo muy infantil: nadie estaba discutiendo eso y ahora estamos hablando de las cosas malas de aquí. Muy síndrome de Helsinki.
Un ejemplos del síndrome de Helsinki: violencia contra mujeres en la UE
Durante los últimos meses he visto un par de debates en esta dirección. El primero a raíz de que Finlandia es uno de los países con más violencia de género.
Esto es algo que escribimos hace varios años (y que rescatamos en el post de 7 rankings importantes en los que España gana a Finlandia) y que ha vuelto a ser ratificado por el estudio de la UE que salió hace poco.
El estudio que referenciamos hablaba de muertes de mujeres a manos de sus parejas o ex-parejas, donde España estaba entre los países de la cola y Finlandia en los de cabeza. El estudio de la UE trata sobre mujeres que han sufrido violencia.
Sobre todo vi esto en twitter, en las «noticias» (las comillas son intencionadas) españolas y en los comentarios de la notica de YLE sobre los datos.
La polémica
De ese último enlace vale la pena leer los comentarios al final de la noticia: van desde el negacionismo hasta admitir que el estudio está bastante bien hecho. Esto se dio en mayor medida en españoles viviendo en España (lo que no es, claro, el síndrome de Helsinki), y en menor en españoles viviendo en el extranjero – que también -, según lo que yo he visto.
Resultados del estudio.
Este estudio de la UE está hecho por profesionales.
Lleva un gran trabajo para adaptar las preguntas en diferentes países para que los resultados fueran comparables. Se puede ver como detallan en la metodología del estudio (página 9; PDF; ENG).
Los datos
Se ve que pasaron por 8 iteraciones hasta que las preguntas fueron perfectas desde un punto de vista de comparación entre países. Estos resultados fueron en general muy matizados, siendo los argumentos «es que en el norte hablan más sobre ello» o «tienen más coraje para hablar sobre ello» los más usados.
Argumentos que el propio estudio – que nadie tuvo tiempo de leerse, así que opinaban basado en percepciones personales y prejuicios – explica: el cómo han hecho para que fueran comparables.
Esto es, profesionales en un estudio de varios años contra opiniones ya hechas también desde hace años, basado en prejuicios.
Estas son las preguntas (PDF; ENG) y este un resumen de los resultados (PDF; ENG). Y un dato: los países con menos violencia contra la mujer son los que más creen que hay violencia en su propio país y viceversa. Finlandia y Dinamarca son de los países donde menos gente cree que es muy común, y es en el que es más común.
El segundo ejemplo: el GEZ alemán
El GEZ es el impuesto sobre tener un televisión o receptor en Alemania. en Finlandia también hay que pagar un impuesto por ver televisión pública o no.
Una carta del GEZ. Fuente (CC: by)
Este impuesto – que no es un «impuesto» porque no es cobrado por el gobierno, sino por una compañía, y que no sale de tus impuestos, sino que hay que pagar a parte y en cuantía fija – era esquivado por muchos alemanes.
Y esto porque, según sus propias palabras y criterios, las cadenas públicas de televisión son más bien malas en cuanto a calidad.
No sólo eso. El «impuesto» recogía al año varios miles de millones euros, que se iban en contratos inflados, clientelismo y amigismo en esas cadenas – eso se escucha por parte de los alemanes – y, simplemente, quieren más y lo han expandido en una jugada de lobby que está a día de hoy en los tribunales y que ha unido a cientos de miles de personas en contra.
El cambio de la ley
El cambio de ley de «date de alta voluntariamente cuando tengas TV» a «un impuesto de televisión por casa: ahora pagáis todos tengáis tele o no, y ya nos lo gastaremos nosotros como estimemos oportuno» es lo que ha ocurrido.
Ahora bien, mucha gente española en Alemania, al hablar de ello, enarboló el «ahora vives aquí, calla y paga. Y si no te gusta, apechuga o vuélvete«.
En absoluto. No hay que apechugar. Los propios alemanes, que llevan una vida con esto, no lo están haciendo y el servilismo no es la solución. Síndrome de Helsinki de manual.
John McLane en Jungla de Cristal, y u «síndrome de Helsinki». Fuente (CC: by)
Estés donde estés, ¿qué opinas de este «síndrome de Helsinki»? ¿Has participado en alguna conversación y ocurrió? ¿Sobre qué era?
Evidentemente hay muchas veces que la queja sobre el país al que se ha ido desde España es ilegítima y no tiene razón. Hay veces en las que lo que se hace en el país en el que estamos viviendo de expatriados está bien hecho.
Pero esto no hace el síndrome de Helsinki sea algo menos real: el papismo y el no quejarse sobre cosas que claramente van mal. ¿Tú qué opinas?
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Sinceramente, yo lo padezco bastante a menudo, lo confieso. Pero tambien es que parece que solo caigo en foros en los que siempre se opina que el pais en el que se esta es una mierda y Espania es lo mejor de lo mejor de lo mejor. Entonces suelo ponerme del otro lado.
Supongo que lo bueno es ni una cosa ni la otra, pero es muy dificil encontrar a alguien objetivo, normalmente al que se encuentra bien en su pais todo es maravilloso y al que esta amargado todo le parece una mierda y tiende a idealizar Espania.
Por mi parte puedo decir que cuando decidi venirme a Suecia todos me dijeron que si estaba loca, etc, asi que ahora cuando veo algo malo (y hay muchas cosas) no lo digo, porque enseguida me contestan «lo ves, no tenias que haberte ido, nosotros teniamos razon».
Muy interesante la entrada, por cierto.
Cursando mi estudio de finés (o finlandés, creo que se ha aclarado en este blog), lo hago con muchos extranjeros de varias, distintas y diversas partes del globo.
Sinceramente hay gente que me resulta incomprensible que se haya trasladado a Finlandia, con la cantidad de pestes que hablan de los finlandeses y sus costumbres. También, me cuesta entender que aún sigan estudiando el idioma, cuando, según ellos, su país de origen (cualquiera sea este) los espera con tantas mejores condiciones.
Yo soy argentino, y no sé que síntoma padezca, pero intento a diario verle el lado positivo al país en el que resido. A veces suelo perderle objetividad, tal vez por el mero intento de pasármela mejor con una actitud más positiva.
Supongo que será el tiempo quién me haga madurar más mi mirada, o tal vez, quién sabe, ojalá reivindicarla.
Coincido con Lyra, es un muy buen post Santiago.
Me alegro de que os haya gustado el post! Evidentemente hay quejas que no llevan razón, pero el «no me quejaré nunca de nada y el que lo haga que se vaya» o «pues mi país peor porque pasan X, o Z» (en el post en Facebook alguien usó eso mismo cuando no venía a cuento: estábamos hablando de Finlandia) son cosas que no entenderé… sobre todo porque los propios habitantes del país se quejan de ello (por ejemplo los alemanes con el GEZ se quejan, pero hay veces que hablando con extranjeros dicen «Pues aquí es así, paga y calla»).
Un abrazo a los dos y que todo siga lo mejor posible en los países en los que estemos 😀
El caso parece quejarse siempre ya sea por quejarse o por no quejarse. a vivir la vida más bien!
Santiago, tu artículo me parece extraordinario. Creo que es único. Que yo sepa, no hay nadie más que le haya dedicado un sólo minuto a leerse el estudio original. Y me produce auténtico bochorno que unas personas que se consideran «expertas» en el tema, se les ocurra criticar el estudio sin habérselo leído siquiera. Me refiero a estas grandes mentes de nuestro tiempo:
http://www.publico.es/sociedad/cifras-violencia-genero-paises-nordicos.html
Marisa Soleto, Directora de la Fundación Mujeres, avisa: «Hay que tener en cuenta dos cuestiones para hacer la comparación entre España y la UE y es que ni las legislaciones ni las formas de contabilización son homologables»
Esta no solo no se lo ha leído sino que ni siquiera se ha enterado de lo que va el estudio.
“La violencia de género es un fenómeno muy complejo, y si a ello le añadimos el contexto cultural, político, y social tan diferente entre unos países y otros de la UE, hacen que cualquier comparación deba hacerse con mucha precaución.” Advierte Zulema Altamirano, especialista del Instituto Europeo por la Igualdad de Género.
Esta parece que mas o menos sabe de que va el estudio pero demuestra que no se le ha ocurrido ni de lejos asomarse al original a ver como controlan las variables. Mejor negarlo. Si de todos modos nadie la va a poner en duda. Porque la gente tampoco se lee esas cosas.
En fin, vergonzoso. Que un ciudadano común haya tenido el rigor de leerse el estudio original y de preocuparse por resolver la duda sobre la comparabilidad entre países me parece muy edificante pero que las «expertas de género» no hayan hecho este mínimo ejercicio de rigor y de responsabilidad me parece lamentable. Solo se les pide que lean….lean un poco, señoras. Que el documento es público. Aunque en inglés, eso sí. Supongo que a estas chicas les debe costar mucho traducirlo. O simplemente que esa es su «científica» manera de abordar los problemas. Que mas quisieran ellas que llegarle al polvillo del zapato de los expertos (estos si) que han hecho el estudio. Cuando te metes en profundidad a ver como han controlado las variables te quedas impactado de la calidad y del rigor con que han diseñado todo el estudio. Impresionante, de verdad. Están a años luz de estas ineptas.
Tiene cojones que tenga que venir un chaval que vive en Fnilandia a poner coloradas a esas «expertas» españolas que ganan un sueldazo por no hacer lo que deberían. Más justo vería yo que te dieran sus ganancias porque has demostrado ser muchísimo mejor científico que ellas.
Y este bulo que han propalado estas «expertas» lleva años consolidado. Aun sigo leyendo ese argumento cada vez que alguien saca este estudio en un debate. Yo siempre trato de contrarrestar mostrando tu artículo (que lo tengo guardado como oro en paño) para que al menos la gente con cierto criterio, conozca la verdad. Pero me parece que por ahora van ganando ellas.
Gracias, Santiago. Muchas gracias.
Gracias a ti por tomarte el tiempo de comentar!! Un saludo.
Hola de nuevo, Santi, despues de 4 años vuelvo a comentar en tu estupendo blog para darte una noticia que seguro que te va a gustar.
Unos científicos han repasado los resultados de la famosa macroencuesta de la FRA (como hiciste tú en el artículo, sacando la parte de la metodología donde explicaban como garantizaban que las medidas fuesen válidas y no estuvieran influidas por la cultura de cada pais) y han llegado a la conclusión de que las diferencias entre España y Suecia reflejan diferencias reales y no sesgos de medida (que si es que allí están más concienciados y tal).
https://journals.plos.org/plosone/article?id=10.1371/journal.pone.0217015
«Our results showed that the higher levels of physical and sexual IPVAW in Sweden than Spain reflect actual differences in IPVAW prevalence and are not the result of measurement bias, supporting the idea of the Nordic paradox.»
Si funciona con Suecia, es de esperar que con el resto de paises tambien se cumpla, Finlandia incluída.
Asi que ya no debe quedar ninguna duda de la validez de este estudio.
Te lo dejo por aquí por si hace falta callar bocas.
Saludos cordiales
Gracias por acordarte y por traernos ese post!
Yo la metodologçia la verdad es que nunca la dudé: quien se la lea verá que está hecho bastatne bien, pero siempre es bueno traer otros estudios que lo avalen para seguir callando bocas.
Gracias de nuevo!
Lo del sindrome de Helsinki es una expresión que no sólo se utilizó en La Jungla sino tambien en un capítulo de la temporada 5, para referirse a un hecho de esa serie que es que un secuestrador que sufre una ilusión un tanto loca secuestra a Mulder y Mulder acaba creyendose esa ilusión.
El capitulo al que me refiero en mi anterior comentario es un capitulo de la serie Expediente X.